De la escuela del potrero..

Si que me motivó leer las declaraciones de Andres Ríos en Olé. Este si que sabe a lo que nos referimos cuando nombramos este a espacio “olor a potrero”. Termino de escribir por escribir y les dejo esta joyita, una clase, en la escuela del potrero:


“Por algo muchos jugadores salieron del potrero. Algo hay. En los potreros se aprende a soportar el roce, a manejar la pelota en lugares difíciles y uno se enfrenta con jugadores más grandes. Hay que aguantarse las patadas y seguir jugando. Creo que se aprende la picardía, la viveza y la chispa de querer ganar siempre. Los días de semana se jugaba por la Coca. Los sábados, la cosa era por la entrada al boliche. Se ponía lindo. Por suerte tenía un buen equipo, pero como soy de pisar la pelota y eso acá no gusta, me ligaba un par de correctivos. A veces se armaba".